Camino a las Peñas del Prado paramos a escalar en la Peña del Pincuejo. Un bonito lugar de la montaña leonesa enclavado en un desfiladero muy estrecho por el que discurre un arroyo de montaña. El lugar nos lo había recomendado Fernando, un amiguete de León. Nosotros estuvimos por la tarde pero es ideal para escalar por la mañana y cuando el calor aprieta bajarte a las pozas y cascadas del arroyo a bañarte.
El único defecto del sitio el constante ruido de los coches que pasan por la autopista. El punto de partida es el pueblo leonés de Caldas de Luna, cogiendo la primera salida de la autopista Oviedo - León. De la parte alta del pueblo sale un camino que nos lleva hacia el desfiladero. A la entrada de él se deja el coche (en un parking pequeño) y andando 5 minutos se llega a las vías. Decidimos escalar las vías “Espolón Pioneros” y “Línea Blanca”. Están catalogadas de MD inferior y los pasos más difíciles tienen la dificultad de V+ pero son pasos, no largos de V+. Son vías consideradas “placer” ya que las reuniones están montadas, en los largos hay algunos clavos o chapas en los lugares donde no se pueden asegurar y el resto se protege perfectamente con empotradores y friends. También es conveniente llevar algún cordino para los puentes de roca. Las vías se rapelan por donde se escalan.
Espolón Pioneros
Línea blanca
Peñas del Prado
Este era realmente el objetivo de nuestro viaje. Se encuentran situadas en un escondido rincón de la montaña leonesa que sólo conocerlo justifica el viaje. Son un cordal de cumbres de caliza que van desde las Peñas del Prado hasta las Tres Marías. El pueblo de referencia es Cubillas situado a 1383 metros de altura y a unas decenas de kilómetros de Caldas de Luna. Al poco de pasar un primitivo túnel que conduce a Cubillas, se dejan los coches, en el arcén de la carretera. De aquí se parte andando por unas terrazas hacia el collado de Alonga. No tiene pérdida ya que por el collado pasa el tendido eléctrico.
En la suave subida se ve perfectamente toda la cara sur de las Peñas del Prado. Varias decenas de vías recorren tanto la cara sur como la suroeste. Son vías consideradas “placer” ya que aunque hay que utilizar material de aseguramiento los pasos más difíciles y que no se pueden proteger tiene clavos y chapas. Al menos esto es lo que nos encontramos en las vías que escalamos. Bien es cierto es que algunos no se les veía muy nuevos y su resistencia era bastante cuestionable. También existe la posibilidad de asegurarte a puentes de rocas, algunos de “ensueño”. En la cara suroeste escalamos Una historia interminable. Siete largos realmente disfrutones y la roca soberbia, sobre todo a partir del 2º largo. Está catalogada de MD con pasos obligados de V+. Hay un largo que tiene pasos de 6a y otro largo, el más duro de la vía, con una entrada de 6b y una continuación de 6c+. Con la agilidad que dan los estribos lo superamos. Es la primera vía que se abrió en esta cara. El descenso lo hicimos rapelando el último largo y llegando hasta el 5 largo y de aquí, y en dos rápeles con cuerdas de 60 metros bajamos por la vía Lobishome.
Una historia interminable, largo 1
Largo 5
Largo 6
Largo7
La tarde la pasamos escalando el primer largo de Sin aspiraciones a nada y continuando por el segundo de Lago de luna. El primero es un bonito largo de canalizos y el segundo un disfrutón diedro. Por cierto esta debe ser la vía que más se escala por la cantidad de cordadas que vimos escalándola en los dos días que estuvimos.
Sin aspiraciones a nada, largo 1.
Lago de luna, largo 2.
El domingo y pensando en el viaje de vuelta decidimos escalar la vía La Negra. Un aéreo espolón en la cara sur de 5 largos aunque el primero lo trepamos (III +) con lo que se quedó en cuatro. La dificultad es igual que la de Una historia interminable con un largo con varios metros de 6c+ que lo pasamos en artificial.
La negra, vista general de la vía
2ºlargo
3er largo
4º largo
Después de tres días escalando en León volvimos para casa con la idea de que hay que volver. Por cierto, muy recomendable el libro de Adrados “Escaladas selectas en la Cordillera Cantábrica”: vienen descritas 1.200 vías entre ellas las de estos sitios.
